Recé piadoso

La conocí a los dos días de nacer, fue imposible llegar antes. Tenerla en brazos fue, indescriptible. La gente es imbécil, claro que me emocioné, pero no fueron lagrimas de rabia, porque fuera otro el padre, o celos, o puñetas por el estilo. Claro que estaba enamorado de ella hasta las trancas, y el verla inmensamente feliz, con su hija en brazos y dejándome que la cogiera…. Plufff, se me fue la pinza y el tendedero entero y, simplemente se escaparon dos lagrimones del carajo… pero solo eso, ni celos, ni rabia, ni odios, ni mal rollo, ni puñetas… De verdad, casi que más feliz que la madre. No, claro que no fue una reconciliación con Macarena y gilipollas, fue más un… entente cordiale, un pacto de no agresión… un yo no te sigo llamando zorra y tú me dejas ver a la niña cuando quiera…. También estuve en su primer cumpleaños y en el segundo, y en todos seguidos hasta el quinto. Y la enseñé a nadar antes que caminase, y a decir tacos, y a cantarle a su padre “…Sufre mamón devuelveme a mi chica, o te retorcerás entre polvos pica… y con cuatro la montaba en moto, y la perdí, 20 minutos horribles, en las piscinas de Bajamar, y también un día se me olvidó recogerla de la guardería… y…todo fue genial hasta el día del notición y el: “NO TE VUELVAS A ACERCAR NUNCA A MI HIJA” Nunca entenderé relacionar el culo con las témporas, ni una opción sexual con un abominable delito. Pero es eso, quien es gilipollas no se puede pretender que piense. Nunca le hice puto caso, pero claro a escondidas no fue igual. Ya con dieciséis, hasta los pinos del coto, sabían que nos escribíamos, nos mandábamos e-mail, y nos llamábamos por teléfono, con lo que el permiso para pasar una semana en mi casa en Paris fue más un formalismo rentable y cuestión de protocolo, que el reconocimiento de un error. No, no es como mi hija, una hija es otra cosa. Tampoco es una amiga. Supongo que es una mezcla, entre una y otra cosa, a la que quiero mogollón… Pues eso, Maca, la hija de Macarena, la niña de mis ojos… La cosa más preciosa del universo, ayer contando a su amiga del alma Ana, la escena de Pau en la piscina dijo: .”… y la tiene así, mientras enfrentaba una mano y la otro para indicar un tamaño claramente exagerado, es… mucho más grande que la de Juan Carlos….- me tragué el resto del Gin Tonic, limón incluido y recé piadoso para que no se dieran cuenta que las había oído….